Para los que no podéis tomar alcohol no os preocupéis que una vez finalizado el guiso no quedará ni pizca, lo que si quedará será un sabor muy pero que muy sabroso.
Empecemos:
Ingredientes
- Un pollo troceado
- 2 cebollas
- Una cerveza (la marca que más te guste)
- Aceite de oliva
- Sal
- Pimienta
- Salpimentamos el pollo. No os paséis con la sal ;)
- Poner a calentar el aceite a fuego lento en una olla o cacerola, lo que tengas a mano.
- Trocear la cebolla y dorarla. Yo prefiero la cebolla bien pequeñita, pero esto va a gustos. (Cuidado no se os queme)
- Una vez dorada, añadir el pollo y dorarlo durante unos 4 minutos. Hasta que veáis que se pone "Rubio", para esto darle un poco de fuerza al fuego.
- Una vez esté el pollo doradito, bajad el fuego y añadir la cerveza con un poco de agua (muy poca).
- Esperar a que todo el alcohol haya reducido completamente junto con el líquido y el pollo acabe de dorarse, más o menos una media hora.
NOTA: Dependiendo los gustos de cada uno, podeis añadir un chorrito de coñac en el momento de verter la cerveza. Esto le dará un toque distinto al pollo.
Espero que os chupéis los dedos.
Un abrazo,
Yolanda
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